El transmisor de presión diferencial es el transmisor más comúnmente utilizado en la práctica industrial, ampliamente empleado en diversos entornos de control automático industrial, incluyendo oleoductos, conservación del agua e hidroelectricidad, transporte ferroviario, edificios inteligentes, control automático de la producción, aeroespacial, militar, petroquímica, pozos petroleros, energía eléctrica, barcos, máquinas herramienta, suministro de aire por tuberías, presión negativa de calderas y muchas otras industrias.
El principio de funcionamiento del transmisor de presión diferencial es que la presión del medio actúa directamente sobre el diafragma del sensor, de modo que el diafragma produce un micro-desplazamiento proporcional a la presión del medio, lo que hace que la resistencia del sensor cambie, y el circuito electrónico se utiliza para detectar este cambio, y convertir y emitir una señal estándar correspondiente a esta presión.



